lunes, 3 de junio de 2013

HABLAMOS DE TI JOSÉ, PERO NO CON PENA

Mientras regreso de mi  estancia en Barcelona pienso y recuerdo a la persona a la que he venido a acompañar en el momento de pasar al otro lado. Como recuerdo, como homenaje, como admiración, transcribo íntegramente el texto que formo parte de la ceremonia del adiós.
La muerte no es nada: yo solamente estoy en el otro lado.
Yo soy yo, vosotros sois vosotros.
Lo que he sido para vosotros, lo seré siempre.
Llamadme por el nombre por el que siempre me habéis llamado. Hablad como siempre lo habéis hecho: no empleéis un tono diferente, ni solemne ni triste.
Continuad riendo de lo que reíamos juntos.
Vivid, sonreíd, pensad en mi.
Que mi nombre sea pronunciado en nuestra casa como siempre se ha hecho, sin énfasis ni angustia.
La vida significa lo que siempre ha significado, el eje es el que siempre ha sido, el hilo no se ha cortado.
¿Por qué estar fuera de vuestro pensamiento, simplemente porque estoy fuera de vuestra vida?
Yo os espero. No estoy muy lejos, tan solo al otro lado del camino.
Bienvenidos y gracias por asistir al homenaje que hoy celebramos en memoria de José.
Hoy es un día triste, pero nos hemos reunido para darle un último adiós, y sobre todo para recordar todos los buenos momentos que habéis pasado a su lado y acompañar a una familia que pasa por unos momentos difíciles, porque es en momentos así cuando agradecemos tener el soporte de los que más nos quieren.
La gloria del mundo es transitoria, y no es ella la que nos da la dimensión de nuestra vida, sino que es el camino que nosotros escogemos, nuestra Leyenda Personal, nuestras creencias, utopías, nuestros sueños…
Nosotros no escogemos el momento de nuestra llegada, pero con nuestro nacimiento empieza; Nuestra historia.
Ésta se va formando con nuestras metas, nuestros ideales, las ilusiones y esperanzas que ponemos en cada uno de los proyectos en los que nos embarcamos.
Proyectos que marcan nuestra existencia y que empezamos solos y de manera unilateral, pero con el tiempo vamos encontrando acompañantes en nuestro viaje.
Un viaje que no empieza en una estación de tren, sino que empieza en el último vagón de un tren que está en movimiento constante y nosotros vamos avanzando por cada vagón abriendo y cerrando puertas; de la misma manera que empezamos y finalizamos etapas de nuestra vida.
Cuando el tren ha llegado a su estación es cuando también nuestros proyectos llegan a su fin.
Pero nosotros como protagonistas de nuestra existencia podemos escoger dos caminos: construir o plantar.
Los constructores pueden tardar años en terminar su obra, pero un día la terminan y ese día son sus propias paredes las que los limitan, y la vida pierde sentido cuando la construcción termina. Pero también existen los que plantan, éstos a veces sufren las tempestades, las estaciones y raramente descansan.
Pero a diferencia de un edificio un jardín nunca deja de crecer, y es éste el recuerdo que os ha dejado José y ahora vosotros tenéis que hacer que siga creciendo.
Como dice el poema de Martí Miquel i Pol:
Hablamos de ti José, pero no con pena. Sencillamente hablamos de ti, de tus cosas hablamos y también de tus gustos, de lo que amabas y de lo que no amabas, de lo que decías, hacías y sentías; de ti hablamos José, pero no con pena.
José, al oír ésta música, una de tus favoritas, nos hubieras hablado del famoso Armstrong, las películas en las que participó y con quien. Y de ahí a más y más, horas y horas nos hubieras hablado de tu gran mundo, el cine. Con él llenaste tu vida de imágenes, libros, estrenos, fichas técnicas, de ilusión, de cultura y sobretodo de amigos; con los que muy generosamente compartías tu gran pasión, el cine.
Para finalizar ésta ceremonia me gustaría agradecer en nombre de la familia vuestra asistencia y sobre todo vuestras más sinceras muestras de amor y de soporte, que les habéis mostrado.
Dicen que ningún sentimiento envejece con el cuerpo. Que los sentimientos forman parte de un mundo que no conocemos, pero es un mundo donde no existe tiempo, ni espacio, ni fronteras…
Traed a éste mundo la esencia de José, los sentimientos que tenéis a flor de piel y con esta pieza musical recordadlos para que así su recuerdo pueda estar entre vosotros…

No hay comentarios:

Publicar un comentario