A TATA MADIBA

Se han cumplido 65 años de la Declaración Universal de los Derechos Humanos (10 diciembre 1948). Declaración compuesta por treinta artículos que hablan tanto de los derechos civiles y políticos, como los económicos, sociales y culturales; y que pertenecen a todas las personas, sin discriminación alguna. Declaración que valdría la pena leer a menudo y pedir que se cumpla, que no se infrinja de forma tan flagrante.

Pero este aniversario, creo que adquiere especial relevancia, pro el hecho de que coincida con la ceremonia de despedida de uno de los más grandes y relevantes hombres del siglo XX. Nelson Rolihlahla Mandela.  Político y abogado sudafricano que llego a ser presidente de la República de Sudáfrica de 1994 a 1999. Un hombre que lucho por ser libre siendo negro en un país dominado, reprimido y esclavizado por blancos.

Nelson Mandela, junto con hombres relevantes como Konrad Adenauer, Martin Luther King, Winston Churchill, Charles de Gaulle, Yasser Arafat, John F. Kennedy, Willy Brandt,  entre otros, marcaron una época en la historia de la humanidad si bien es preciso destacar que Mandela, ha sido el gran defensor de los derechos humanos. El luchador más relevante contra el Apartheid y distinguido en 1993, junto a Frederik Willem de Klerk, con el Premio Nobel de la Paz

Mandela, afamado líder, reo, conciliador, mito y presidente, transmitía paz, bondad, esperanza, fuerza, dignidad, valor, tolerancia, sacrificio…Líder carismático por excelencia nos ha dado una gran lección por su devoción a la humanidad y las causas humanitarias. Él hizo lo que consideraba su deber para con su gente, su pueblo, su país, para el mundo en general por eso, si físicamente no está, siempre vivirá en el pensamiento y el corazón de quienes aman la libertad.

Los visitantes que despiden a Tata Madiba se detienen por un instante ante el ataúd que contiene el cuerpo inerte, algunos hacen reverencias, se colocan la mano sobre el corazón o sobre el féretro y fuera, en las calles su pueblo llora, canta y baile como postrero homenaje a su liberador.

Los funerales de Nelson Mandela se han convertido en un espectáculo impresionante a los que han acudido gran número de mandatarios y representantes de todos los países, incluso de aquellos llamados democráticos pero en los que se reprimen las libertades, se crean proyectos de leyes que coartan las libertades básicas de las personas. Gobernantes de países que salvan las deficiencias de gestión de sus bancos mientras condenan a la miseria a los más vulnerables permitiendo el desahucio y desarrollando una política de recortes en sanidad, enseñanza, cultura, investigación, ayudas sociales y que ha preferido recortar los derechos de los ciudadanos y subir tasas e impuestos.

¡Adiós Nelson Mandela!